Tienes grandes planes pero no cuentas con los recursos para llevarlos a la práctica? ¡Anímate a dar el salto! Ser emprendedor te lleva a sacar el mayor provecho a lo que tienes. Y es por eso que algunas de las empresas más grandes comenzaron en uno de los lugares más versátiles: el garaje. Presentamos cinco ejemplos de éxitos corporativos notables con comienzos en espacios tradicionalmente reservados para un auto y, quizás, herramientas.
1. Amazon
A los treinta años, y en calidad de vicepresidente ejecutivo de una banca de inversión en Wall Street, Jeff Bezos probablemente no tenía problemas para llegar a fin de mes. Pero al igual que muchos otros emprendedores exitosos, el deseo de crear, innovar y crecer demostró ser más fuerte que la tentación de seguridad ofrecida por un puesto corporativo.
Al considerar nuevas oportunidades de inversión para su firma en 1994, Jeff descubrió una estadística interesante: el uso de Internet estaba creciendo a razón de 2,300 por ciento por mes. ¿Qué hace un emprendedor para sacar partido a este gran potencial? Obviamente, decide pasar un año en su garaje.
Con un equipo de solo cinco empleados que trabajaba desde el lugar donde estacionaba su auto en Seattle, Jeff pasó meses abasteciéndose de libros y creando un proceso de compras por Internet fácil de usar, que conectaba clientes con millones de títulos. Y, si bien no fue perfecta desde el principio ya que, por ejemplo, los primeros usuarios podían obtener un crédito al encargar una cantidad negativa de libros, Amazon ha pasado a ser una empresa multibillonaria a pesar de sus comienzos modestos.
2. Hewlett-Packard
El emprendimiento fundado en un garaje de Silicon Valley puede parecer un fenómeno moderno pero sus verdaderas raíces se remontan a mucho antes de los creadores de aplicaciones y los prestadores de servicios en la nube.
En 1939, Bill Hewlett y Dave Packard comenzaron este emprendimiento de dos personas que operaba desde un garaje individual alquilado en la avenida Addison en California. Por medio de una serie de prototipos ingeniosos, entre otros, maquinas médicas, dispositivos para la astronomía y un mecanismo automático para inodoros con célula fotoeléctrica, se abrieron paso con un oscilador de cambio para ingenieros de sonido que vendieron a Disney para el actual clásico Fantasía.
Alentados por este logro, formalizaron su sociedad y un año después y con dos empleados más, el garaje les quedó chico y se mudaron a una nueva sede. En la actualidad, el garaje original de HP es una atracción turística y un sitio oficial de interés histórico.
3. Walt Disney Company
Como marca que ha producido tantas fantasías donde los mendigos pasan a formar parte de la familia real, resulta lógico que la corporación Disney comenzara su existencia en un contexto común.
En 1923 Walt Disney abandonó su carrera como caricaturista publicitario en Kansas City para mudarse a Hollywood, supuestamente con no más de 40 dólares en el bolsillo y sus materiales de dibujo. Walt y su hermano Roy pidieron un préstamo por 500 dólares y construyeron un pie para cámara en el garaje de su tío para trabajar en el campo de la animación. Bajo el nombre “The Disney Brothers Studio” filmaron Las comedias de Alicia, que luego sería la inspiración para para el largometraje Alicia en el país de las maravillas.
Como es de esperar, no permanecieron en el garaje del tío por mucho tiempo. Casi cien años más tarde, la marca Disney está en los labios de todo niño y se estima que su valor supera los 100 billones de dólares.
4. Harley-Davidson
Harley-Davidson existe desde hace mucho tiempo, pero su historia no solo comienza antes de la de Walt Disney, sino que es posible que haya comenzado antes de los mismos garajes. Si bien esta empresa particular no comenzó en un garaje -–más bien diríamos que comenzó en un galpón— creemos que vale la pena incluirla en esta categoría.
En 1901, William S. Harley diseñó los planos de un motor para bicicletas. En 1903, Harley y Arthur Davidson lanzaron su primera motocicleta al mercado, creada en una “fábrica” que en realidad era un galpón de madera que medía no mucho más de 4 metros y medio. Pero les sirvió adecuadamente y por tres años más, mucho después de haber inaugurado su primer concesionario, cuando se mudaron a una nueva fábrica más grande y comenzaron a contratar empleados.
En la actualidad, la marca es sinónimo mundial de motocicletas en general, y ha pasado a ser una empresa multibillonaria muy preciada universalmente.
5. Google
Después de colaborar conjuntamente por dos años para la creación de un motor de búsqueda, en 1998 Larry Page y Sergey Brin finalmente incorporaron su compañía. Y, naturalmente, para marcar su entrada histórica en el mundo oficial de los negocios, crearon un espacio de trabajo en el garaje de otro. Contrataron su primer empleado mientras operaban desde un espacio alquilado y, desde allí, revolucionaron velozmente la forma en que el mundo entero obtiene información.
Para celebrar sus ocho años de existencia, y para honrar sus comienzos humildes, en 2006 Google decidió comprar la propiedad en la que habían operado en sus comienzos, cuyo dueño había pasado a ser vicepresidente de gestión de productos. De acuerdo a lo indicado por Google, su primer lugar de trabajo “ofrecía muchas ventajas considerables, entre otras, una lavadora, una secadora y un jacuzzi”, y además “garantizaba un sitio para estacionar” para el primer empleado de la compañía.
Si hay algo que queda en claro después de leer estas historias de crecimiento exponencial y éxito ganado con mucho esfuerzo, es que las grandes ideas, las ganancias monumentales y los sueños grandiosos no siempre necesitan un rascacielos para comenzar. ¡Buena suerte!
